viernes, 2 de diciembre de 2016

Análisis médicos

Esta mañana de la cama brinqué al laboratorio para hacerme unos análisis clínicos de rutina. Es una operación para mí harto complicada porque no puedo salir de casa sin antes haberme tomado un café. Ha de ser doble, con un poquito de leche. Y es una cosa que hago automáticamente: me levanto y como un zombie voy directamente a la cocina a prepararlo. 

Llevaba días intentando ir al laboratorio pero cuando me daba cuenta ya me había tomado de manera automática el café y el potito de yogur ese para controlar el colesterol. Así que hoy pasé directamente de la cama a los vaqueros y a la calle. Dudé, de hecho, si de plano irme así, embutida en mi pijama rosa de invierno que es de una tela casi de peluche y cuya parte de arriba dice: "soy el alma de la siesta" -genial obsequio de mi mamá-, pero, aunque estaba un poco dormida, el pudor no me lo permitió. ¿Y si en el camino me encuentro a alguien y yo en esas fachas? 

Total, como sólo iba a salir un momento -el laboratorio está cerca de casa-, dejé las puertas abiertas de par en par. No las de la calle, sino las propias de la casa que quedan regularmente vedadas para la cuadrúpeda que también vive conmigo. 

Llegué al laboratorio y me dijeron: uy, no trae la muestra de orina. Y yo dije: pues no pasa nada, se la doy ahora mismo. La señora que me atiende contestó, bueno, pero es que tiene que ser la primera del día. Ningún problema, le dije yo, lo será. Las tres personas que había ahí en ese momento cerca del mostrador voltearon a mirarme con incredulidad. Y hasta una exclamó: ¡caray, yo lo primero que hago al levantarme es hacer pis! Y en coro todo el mundo: yo también, yo también, yo también. Sí, concluyó el médico, todos lo hacemos. 

Y en fin, tuve que ventilar públicamente eso de que, bueno sí, yo también me levanto y hago pis, pero vivo cerca, brinqué de la cama directamente para acá, no puedo salir a la calle sin antes tomarme un café doble con leche, cuando me doy cuenta ya me lo tomé, etc.

Y entonces el médico me extendió un frasquito diminuto de plástico: tenga, allí está el baño. Ajá. A esas horas. Y sin café. ¿Y si no le atino al agujerito del frasquito? ¿Y si me meo la mano? ¿Y si se desborda? ¿Será una cantidad suficiente? Ay, ¡qué bonito color! Ains, está caliente. 

Total, salí con mi humillante frasquito, caliente y dorado. Se lo entregué. Y sí, era suficiente. De la temperatura y del color, no comentó nada.Y pasamos a las agujas. Yo prefiero no mirar, así como que no me entero y ni me duele. 

Firmé los papeles, dí mi correo electrónico (qué maravilla, envían los resultados por email) y volví a casa para empezar el día de manera decente con un café, doble, con un chorrito de leche. Y un buen baño. 

Llegué, pues, a casa. Habían pasado 15 minutos, no más, desde que salí. Y en ese pequeño lapso, a Trufa le dio tiempo de destruir 3 bolsas de plástico, que encontró en tres habitaciones distintas, y desparramar y mordisquear su contenido. Y de comerse, porqué no si el día va de análisis, los flamantes resultados de mis mamografías.

lunes, 31 de octubre de 2016

Ofrenda perruna


Había en la ofrenda de casa un par de golosinas sabor a cordero para Guinness y para los otros perritos que me han acompañado a lo largo de mi vida y que han partido al más allá. 

Y digo había porque esta mañana, mientras yo estaba en la oficina, Trufa, sin ningún reparo ni respeto a los difuntos, se las zampó.

domingo, 30 de octubre de 2016

Esto no puede seguir así

- Esto no puede seguir así. Tenés que decidirte. O vamos al parque o vamos a la casa. ¿Qué querés?
- ...
- Yo voy con vos a donde querás. ¡Pero decidíte de una vez! Yo lo que no quiero es estar dando vueltas.
-...
- Dale, vamos al parque.
-...
- ¿A la casa? Vamos a la casa, pero esto no puede continuar así. ¿Me entendés?
- ...
- ¿Querés ir en moto?

Me asomo con curiosidad por la ventana y veo a una niña pequeñita, de pañales, subiendo con dificultad a una moto de plástico rosita.

jueves, 20 de octubre de 2016

Jinete sin cabeza


Un jinete sin cabeza, a lomos de un hermoso caballo de bronce, se exhibe en la explanada del Born, en Barcelona. 

Cada día, desde que llegó a instalarse ahí, amanece con alguna nueva ornamentación: huevos estrellados y escurridos, tomates, manchas de pintura, muñecas hinchables, banderas esteladas y moscas despistadas -o no-. 

Hoy amaneció decorado con una auténtica cabeza de cerdo. 

Habría que ir a buscar la cabeza perdida de aquel jinete (dicen que se llamaba Francisco), quizá está por ahí coronando el cuerpo, también decapitado, del marrano en cuestión.

viernes, 16 de septiembre de 2016

Cabeza olmeca


Cada vez que paso por el rectorado de la UPC y me encuentro con ella, me da un vuelco el corazón...

domingo, 11 de septiembre de 2016

13 años

13 años exactos han pasado desde que empaqué lo "indispensable" -eran 6 maletas llenas de cosas imprescindibles y, por supuesto, otros tiempos- y crucé el charco con mi carnala para vivir y estudiar en una ciudad desconocida para mí, bien lejos de la que me vio nacer y a la que echo de menos todos los días. Siempre pienso en qué hora será allá - a estas alturas es un cálculo inmediato-, pienso en qué estarán haciendo mis seres queridos, si se estarán preparando para ir al trabajo o si estarán a punto de irse a la cama. Si saldrán corriendo en camisón porque un sismo se dejó venir como siempre sin avisar. Imagino a su tráfico y sus gentes -que no son pocas-, sus tardes de lluvia, sus amaneceres, su luz, sus puestos de comida en cada esquina y sus desastres de tráfico. Extraño con frecuencia a esa ciudad caótica pero siempre viva, con sus 24 horas en constante movimiento.

Y después de trece años, poniéndole los cuernos con esta otra ciudad, sigue la cosa igual pero no. La ciudad desconocida de aquél tiempo es ahora también mía. Si estoy del otro lado del mar, en mi México querido, la operación es a la inversa. Calculo la hora que será en Barcelona, evoco sus olores y a sus gentes. A su comida y a su mar. Y pienso en los seres queridos que acá también me esperan.

Y así pues,con esos trece años a cuestas, hoy puedo decir que no hay marcha atrás. Que ya no soy sólo de un sitio. Allá hablo raro, acá también. Y así será, desde aquél día en que arrastré esas 6 maletas, ante el asombro de las personas que nos vieron salir del aeropuerto con tanta chunche, hasta el fin de mis días. 

Hoy ya sé que será así: andaré para siempre por la vida con el corazón partido en dos. Y apechugando.

viernes, 2 de septiembre de 2016

La patria y el mequetrefe


El copete no se le cae nunca, pero cuando presentó su tesis de licenciatura se le cayeron casi todas las comillas en la imprenta, dice. Esa noche, la persona de la limpieza habrá llenado una bolsa entera de esos caracteres (eran muchísimos) y, presumiblemente, los echó a la basura. 

Con el tiempo a ese mequetrefe se le han ido cayendo cosas cada vez más escandalosas. 

Hace unos días, y ya siendo presidente de su país, se le cayó la dignidad -todita, entera, no quedó nada-, de esa poquita que le quedaba (aunque, francamente, la verdad es que de eso siempre tuvo bien poco). 

Mira que decir "fue una mala interpretación", el payaso ese, "no quería decir lo que dijo", ¿verdad que no, Mr. Trump? ¿Cómo pensar que alguien que llamó "violadores y delincuentes" a tus compatriotas, en realidad te está diciendo "querido vecino, construyamos juntos una relación de bienestar"? 

El copete, ese sí sigue intacto, pero la patria...

martes, 26 de julio de 2016

Trufa


Nació en Cheste, Valencia, justo un día como hoy hace exactamente dos años. Su madre era una perra hermosa, igualita a nuestra adorada Guinness que, además de bella, era muy lista. Por eso, sin dudarlo ni un instante, decidimos adoptar a uno de sus cachorros. Y hasta allá fuimos, a Cheste (qué nombre más gracioso), habiendo pasado un mes de que habían nacido. El dueño nos entregó una pelotita negra y tímida a la que le pusimos Trufa. 

Se ve que salió al padre, porque de lista no tiene ni un pelo. Ni uno. La timidez no solo no se le ha quitado sino que va in crescendo (le teme desde a todas las visitas -sin discriminar a nadie- hasta a los inofensivos contenedores de basura -a los que tampoco discrimina). Ladra como una descosida por cualquier cosa. Y de vez en cuando cambia su dieta de pienso duro por libros de Almudena Grandes (de preferencia que no hayamos leído aún), zapatistas de tela de lana, figuras de Hugo Chávez - en traje de deporte o militar, tampoco discrimina, le gustan con cualquier atuendo- , café en grano, corchos de vino, plantas (tanto de espinas como sin -tampoco discrimina), chanclas de Blue Demon (las favoritas de su dueña), guaraches mexicanos, vacas de cartón (de preferencia sin terminar), billetes de 10 euros, escobas y muñecas de trapo. 

Ha tardado casi dos años pero ya nos trae la pelota. Y a veces, si le da la gana, va a buscarla cuando se la lanzas. 

Le gusta chupar pies humanos cuando hace calor, de preferencia los míos. Y, pasadas las 10 de la noche, revolcarse en el sofá mientras se persigue la cola, eso sí, procurando tapar toda la pantalla de la televisión, sobre todo si estoy viendo mi serie favorita. 

En invierno le gusta dormir de cucharita y en verano a los pies de la cama, que se está más fresquita. 
¡Salud! por la Trufa que hoy cumple dos años.

sábado, 9 de julio de 2016

La Bruja del 71

A estas alturas ya sabrán que más o menos cada día reviso las efemérides y me sumerjo, con gran placer, en las vidas ajenas. Así descubro a personajes interesantísimos que a lo largo de la historia han ido dejando huella en este mundo. 

Hoy encontré la biografía de Angelines Fernández, una mujer que nació en España el 9 de julio de 1922 y que con 25 años tuvo que poner pies en polvorosa y dejar su país pues colaboraba con las guerrillas en contra del dictador Francisco Franco. Así fue como llegó a México en 1947 y se convirtió en actriz. 

Hoy todo el mundo la recuerda por haber personificado durante muchos años a la famosa "Bruja del 71" del Chavo del 8. 

No cabe duda, Televisa siempre lo enfanga todo.

miércoles, 22 de junio de 2016

De asociaciones y trepas

- No, si lo que hay que hacer es dar unas limosnitas. Así, a diestra y siniestra, pero sólo de vez en cuando ¿eh? cuando nos apetezca, nomás para sentir lo buenitos que somos. Ya con eso armamos un país lindo, la gente a la que le dimos la migajita nos adora, además de que tendremos séquitos detrás con la mano extendida. Esperando siempre. Desesperados. Mientras tanto nosotros seguimos robando, abusando de las buenas voluntades, llenándonos los bolsillos. Trepando. Así, codo a codo, con gente corrupta, manchada de sangre. Lo que hagan para sacar sus recursos no nos importa. Si, total, también nos toca mochada. Para qué hacerle ascos. No tenemos escrúpulos, ni vergüenza. Lo que importa es que los negocios fluyan. Que nos dejen dinero. Que nos den cargos. Que nos den poder.
Y así este mundo.
El otro día, resolviendo el crucigrama dominical vi que la palabra 10 vertical era: "persona que sólo destaca porque está trepando". La respuesta era "mediocre".

A mí se me ocurrieron algunos nombres que poner ahí, con apellidos y todo, pero no me cupieron.

miércoles, 15 de junio de 2016

Brújula


Cenando en buena compañía, distraída y feliz, unos taquitos de cochinita, de lengua y de otras cosas sanísimas y suculentas, no me di cuenta de la hora y el metro cerró. Nada grave si se es una persona normal, con la brújula en su sitio y bien calibrada. En mi caso esa brújula o no existe u opera de una forma misteriosa que hace que siempre vaya yo al revés de a donde quiero/debo ir. Lo tengo asumido. Así que crucé la calle, haciendo caso omiso de mi brújula loca, y esperé al autobús nocturno. A lo lejos lo vi venir y me dije, qué suerte la mía, ese N2 es el que me lleva justo a la casa.

Hice la parada y me subí orgullosa, había además un asiento libre. 

Me senté frente a dos chicos en shorts de piernas re peludas, no demasiado interesantes. Saqué el teléfono y me puse a curiosear los mensajes que tenía. Pasó un tiempo, no mucho, miré por la ventanilla y no reconocí lo que había a mi alrededor. ¡Qué raro! Esto no es la Gran Vía. Me levanté alarmada aunque disimulando. No, no es la Gran Vía. Me bajé. El autobús se alejó y alcancé a ver, aún con mis ojos miopes, que había bajado del autobús N12, no del N2. Observé el terreno, estaba en una rotonda/glorieta, a la que sí reconozco, pero a la que llegan al menos 5 avenidas. Carajo, ¿cuál es la que me lleva a casa?

Leyendo los nombres de las calles - ¿por qué no todas las calles tienen el pinche nombre en la esquina?- encontré la mía. 

Y eché a andar hacia casa. Ni un alma por la calle, pero todo sereno. Al fin y al cabo después de tremendo atracón no hace daño caminar. Venía riendo al recordar un meme que había visto, y que suscribo con alegría, que decía algo así como: soy partidario del equilibrio entre el gym y el ñam. 
Tras media hora de agradable paseo llegué a casa. Sólo para descubrir que no traía llaves.

Cirque du Soleil

El Cirque du Soleil me fascina. Nunca un circo había conseguido emocionarme hasta las lágrimas. Recuerdo con especial cariño el espectáculo "Alegría" que fue el primero que pude disfrutar gracias a la generosidad de mi mamá que se mochó con las entradas. Fue una experiencia increíble. Mágica. Nunca un payaso había conseguido tocarme el corazón como aquella vez. Era un payaso triste y melancólico pero entrañable. El resto del espectáculo fue tan hermoso que lloré a lágrima viva ante su belleza sin igual.
En fin, que el Circo del Sol es maravilloso. Qué bueno que existe, lo malo es que está al alcance de muy pocos. Es un espectáculo que, entre su gran calidad, el cuidado de todos los detalles y la inmensa cantidad de gente que participa en él, resulta bastante oneroso. Una entrada sale en un ojo de la cara o, incluso, en los dos (aunque sea en gallera).

Hasta ahí todo más o menos bien. Lo que ya me parece obsceno es que el gobierno mexicano se gaste, del dinero público y según fuentes periodísticas, la indecente suma de 119.8 millones de pesos anuales - (47.4 millones de dólares, distribuidos a lo largo de 5 años) - para desarrollar un espectáculo inspirado en México, que recorrerá distintas ciudades del mundo como parte de la cartera de proyectos del Cirque du Soleil y hasta 2023.
Esa cantidad anual es 4.7 veces mayor que el presupuesto del Programa de Desarrollo Cultural y tres veces más que el plan Fomento a Proyectos de Coinversión Culturales, del 2016 en todo el país.
En todas esas ciudades, que tendrán la fortuna de que el circo se presente, el precio de la entrada seguirá costando, seguramente, ojos de la cara. Con suerte les dejará instalado, en sus cuerpos emocionados y sensibles, el gusanito subliminal que les conmine a visitar y a conocer la hermosura de México y, cuando finalmente lo hagan, se dejen las perlas de la virgen, que ya no los ojos, pues ya los habrán dejado abonados en otro sitio.
Negocio redondo. Pero...¿para quiénes? O es que ¿a los mexicanos nos dejarán ver el espectáculo gratis? ¿O será gratis para todo el mundo con tal de que el gusanito aquél desate un torrente de deseo y así México reciba a millones de turistas adinerados?

sábado, 4 de junio de 2016

Inmenso mar



El sol brillaba en sus ojos inmóviles.
El hombre lo sacó del agua tomándolo de uno de sus pequeños brazos.
Lo estrechó contra sí para darle calor y empezó a cantarle una nana.
Era sólo un bebé a la deriva.
Lejos de la guerra y del hambre pero ahogado en el inmenso mar de nuestra indiferencia.

viernes, 3 de junio de 2016

Cucú

A mi abuelo
En la blanca pared del comedor de su casa había un cucú. A mí me parecía una máquina mágica y fascinante: era un reloj habitado por un pajarito diminuto. Me lo imaginaba todo el tiempo trabajando, sin detenerse ni un segundo, pues perdería el hilo del tiempo. Ese bichito no paraba nunca, ni de día ni de noche. Cada media hora, religiosamente, aquel pajarito abría la puertecita de su casa para asomarse a saludar y para, sobretodo, piarle la hora exacta a quien estuviera cerca. 

Hace tiempo que esa maquinaria fascinante dejó de funcionar. El pajarito, un buen día, dejó de asormarse a la puerta de su casa. Quizá dejó de hacerlo porque mi abuelo ya no estaba más para escucharlo cantar.

Ese cucú ya no cuenta las horas, ni los años. Ni siquiera sé si aquél incansable pajarito sigue detrás de aquella puertecita. 

Pero yo sí recuerdo, con total precisión y con todo el cariño, que si su tiempo tampoco se hubiera detenido hace exactamente 29 años, mi querido abuelo estaría celebrando hoy su cumpleaños número 106.

jueves, 26 de mayo de 2016

El pito de Mancera



Para ponerle freno al acoso, al jefe de gobierno de la Ciudad de México se le ha ocurrido una brillante y sonora estrategia: regalar a las mujeres un pito rosa, marca ACME. 


El chiste se cuenta solo.

lunes, 25 de abril de 2016

Barcelona et l'amour


El pasado sábado 23 de abril una pareja exhibió su fogosidad en público, concretamente, en el metro de Barcelona. La empresa de transportes sitúa la coyunda en un banco del andén de la parada Liceu alrededor de las 23:55 horas. Una usuaria indignada grabó el calentón y subió el video a las redes sociales por las que se difundió como la espuma. Así mismo, la compañía de transportes tiene la grabación completa de la cópula y la facilitó a la policía catalana para que proceda a identificar a los infractores. Verán si fue un montaje tipo "performance reinvindicativo" o no. ¿Cómo van a confirmar eso? ¿Les van a preguntar cuando los localicen? Hey, ¿qué tal el acto? ¿Fue con final feliz? ¿O nomás fue un arrimoncito?. En todo caso, les caerá una multa de entre 30 y 270 euros y hay quien habla hasta de 6 mil. 

Cuentan también que algunos pasajeros que pasaron a su lado echaron porras: "Uno, dos. Olé. Marquemos el ritmo". Algunos abogan por ellos: "mejor que echen un polvito a que nos roben la cartera"...Otros más dicen entender ahora el concepto de "metrosexual". Uno ya ofreció ideas para nombrar a la criatura resultante: Al nen li podrien dir Liceu i si nena Andana; mientras otros se cuestionan: ¿Somos personas o conejos? Algunos más exigen preservativos disponibles y gratuitos en todas las entradas del metro. Y un portal de noticias ya editó el video con música y todo: "Barcelona et l'amour" lo tituló. 

Y así...de estos polvos vienen los lodos de la prensa de hoy...

jueves, 21 de abril de 2016

Monjas

- Esa monja es un poco rara. 
- Y sí. Hay algunas monjas muy buenas personas, pero hay otras que...¡tú tienes de monja lo que yo! Esta es mexicana. Ojito. A título orientativo te lo digo, como ya hemos tenido de todo. Hay que controlar los nervios, que si no, te pueden destrozar los órganos. ¿Tú has visto qué día hace? ¡Qué día más tonto! Esta mañana fresquito y ahora hace calor. ¡Mira qué sol! ¡Estoy achicharrá!
- ¿Y la Antonia?
- Ella es educada, pero se pasa un poco. Se cree que ha de tener mayordomo. Está impedida, la pobre.
- Ah, ¿pero no anda?
- No, ¿no ves que siempre anda ahí con ella su marido ayudándola en todo?
- ¿Es su marido? ¿Y qué hacen ahí juntos los dos metidos en la residencia?
- Son viudos los dos y se conocieron ya ahí, con las monjas. Se casaron ahí a la vuelta, en la iglesia de Pedralbes. 
- Anda, ¡qué interesante! Pero él es muy joven, ¿no? ¿Qué hace en la residencia?
- Él está mejor conservado que ella, sí. Pero es mayor. Tiene un hijo solo. Y los dos enviudaron. Y ya se sabe, acabaron ahí.

Las dos mujeres se levantaron de sus asientos, tomaron sus historias, sus paraguas y sus bolsos y, desgraciadamente, se bajaron del autobús...

viernes, 15 de abril de 2016

15 de abril

El 15 de abril es el día en el que al mundo le nació el gran Leonardo (da Vinci en 1452). Seis años antes, y el mismo día, el arquitecto y escultor renacentista Filippo Brunelleschi murió. 

En la misma fecha y siglos más tarde nació otro brillante Leonardo (uno de los más grandes y prolíficos matemáticos de todos los tiempos: Leonhard Euler, en 1707). Y en la que, casi 200 años más tarde, vio la luz la talentosa Bessie Smith, la llamada Emperatriz del blues (en 1894). 

Se ve que al entrar el siglo XX algo se torció porque es el día en el que el Titanic se partió en dos en 1912 (murieron 1517 personas). Y es también el fatídico día en el que una avioneta, pilotada por el Capitán Cruz, se cayó en Mérida, Yucatán, en 1957. Ese capitán no era otro sino el ídolo de masas Pedrito Infante abandonando este mundo para siempre (O no, ¡Pedro Infante vive! - Grita el coro enardecido). También es el día en que murieron los escritores César Vallejo (1938) y Jean Paul Sartre (1980). Y en 1990, mientras nacía la actriz Emma Watson, Greta Garbo cerraba los ojos para siempre. 

Curioso.

jueves, 31 de marzo de 2016

Ombú

Caminando por Alicante me encontré un árbol alucinante, como de cuento. Seguro que mientras nadie lo mira se arranca a caminar.

miércoles, 30 de marzo de 2016

Cachorra del Imperio


Yo tenía dos muñecos de barro decorando la estantería de libros. Uno era un Hugo Chávez en traje de militar. Otro en "chandal" con la bandera venezolana, ese que le gustaba tanto. 

Hoy al llegar a casa el del "chandal" había perdido la cabeza. Del del traje militar sólo pude localizar las piernas. 

¿Alguien quiere adoptar a una perrita? Es muy cariñosa. Bolivariana, eso sí, no es. Claramente. 

Razón aquí.

jueves, 17 de marzo de 2016

Leo


Pantalón pitillo. Camisa sin mangas. Brazos llenos de tatuajes. Gorra de policía. Ojos mapacheados. Guitarra en mano. En todo el cuerpo eso que llaman "actitud". El hombre era todo un espectáculo. Lástima que la imagen no tenga sonido. Cantaba una canción punk, re punk, que decía: "carne de hippie, maldita, podrida" una y otra y otra vez, mientras la mayoría de pasajeros escuchaba y miraba entre el pasmo y el terror. Algunos más sonreíamos. 

No llegué a saber si la canción decía algo todavía más profundo pues llegué a mi destino y tuve que abandonar el vagón...

jueves, 10 de marzo de 2016

Perra vida


Caminando de regreso a casa me encontré a la vecina de enfrente. Vive en un tercer piso y desde su balcón tiene una vista preferencial hacia la terraza de casa. Disfrutó hace tiempo, y me lo contó feliz, la batalla de Trufa contra la escoba (que ganó ella, evidentemente). Otro día rió a carcajadas cuando la batalla no fue contra una inane escoba sino contra todas las macetas y sus pobres habitantes. Esa guerra también la ganó ella. Y la sigue ganando. 

Hoy, la señora de enfrente, sonrió a lo lejos nada más al verme y cuando me tuvo cerca me soltó:

- Ayer pensé mucho en vosotros. Me reí tanto. Me asomé al balcón y vi a tu perrita a sus anchas tomando el sol, bien fresca ella, subida en la tumbona. Eso hace todas las mañanas mientras vosotros estáis fuera, trabajando. 

Y yo pensé: pobrecita Trufa, ¡qué perra es su vida!

martes, 1 de marzo de 2016

El baile semanal


Un teclado, de esos que hacen todo tipo de sonidos, acompaña a Omar, el hombre orquesta. Visiblemente emocionado saluda a la concurrencia. Recita las reglas: no se pueden mover las sillas, ni apartar lugares. Cuando completemos el aforo no entra nadie más. 


La música empieza a sonar. Las parejas se acomodan en la pista. 

La sala está casi llena, en las sillas reposan abandonados los abrigos y los bastones. El salón es un mar de cuerpos de cabecitas blancas que bailan y gozan a buen ritmo. Como toda la vida.
Yo, desde fuera, los observo emocionada y olvido la rabieta que me provocó la señora mayor que me empujó en el autobús. Ella, muy emperifollada, pasó por encima de mí jaloneando a un viejito que me pareció de cien años.

Ahora lo entiendo todo: no quería perderse ni un minuto su cita semanal en aquél salón, donde todos los martes mueve el esqueleto y goza como cuando tenía 15 primaveras. Yo también tendría prisa, tampoco correría el riesgo de quedarme afuera.

miércoles, 10 de febrero de 2016

No se mata la verdad matando periodistas



Veracruz. 2 am. Un comando armado entra en su casa. La localiza en su habitación. Se la lleva a la fuerza. Periodista levantada, dice la prensa. 

Al día siguiente: Hallado cuerpo en Puebla. Cadáver de mujer encontrado en carretera. Se confirma su identidad. 

Tiene las manos atadas a la espalda. No trae zapatos. Uno de sus pies está desnudo, el otro aún conserva un calcetín de colores brillantes. Alguien le bajó el pantalón gris, descubriendo así -a los ojos de cualquiera-, los muslos inertes y la ropa interior del color del luto. Una sudadera, también gris, le tapa sólo media espalda y una bolsa de plástico azul le cubre la cabeza. 

Conocemos todos esos detalles por la foto que publica la prensa, sin ningún pudor, ni respeto, también, a los ojos de cualquiera. Es ella, dicen. 

Anabel Flores Salazar, 27 años. Periodista en Veracruz. Dos hijos pequeños. Torturada, asesinada y abandonada en el km 1+580 de la carretera Cuacnopalan-Oaxaca, con dirección a Tehuacán, en Puebla...

miércoles, 3 de febrero de 2016

Sherlock Holmes


Barcelona. 02/02/2016. 17:35 hrs. El metro llegó a la estación, se detuvo. Los pasajeros que tenían que bajar, bajaron. Los que tenían que subir, subieron. Las puertas se quedaron abiertas de par en par. El motor se apagó y se quedó todo en silencio. 

Un manojo de niños, al menos cinco, salieron de un vagón y corrieron por el andén hacia la cabina del conductor. Un pequeñajo rubio, con gafas, regresó al vagón gritando y con el alma en un hilo:

- ¡Que no hay conductor! ¡Lo han asesinado o algo! 

Y luego volvió a gritar alarmado: ¡Que no hay nadie en la cabina! ¡Lo han asesinado!

Mientras el pequeño Sherlock Holmes corría en dirección contraria, de una cabina pequeña del andén salía el conductor: sonriente e intacto pero con la vejiga vacía...

martes, 19 de enero de 2016

"Presencia exterior mayestática"

Psss, como el edificio de 1847 es ya un vejestorio, que ha sufrido cambios e incendios a lo largo de su historia, vamos a dignificarlo y a darle potencia con unos anillitos. ¡Sí! Con 170 anillos esmaltados de más de un metro de diámetro y 18 cm de ancho distribuidos por toda su aburrida fachada. 

Un proyecto "magistral" del artista visual y escenógrafo Frederic Amat. 

Y así nos pasamos el patrimonio cultural e histórico por donde no suena. 

"Presencia exterior mayestática", para el gran Teatre del Liceu, le llaman a esto. ¡Qué horror!